Hola a todos, de nuevo:
Ya he perdido un par de kilos desde que empecé de nuevo, y la verdad, sin hacer deporte, me cuesta un poco más, pero no es imposible, evidentemente.
He reducido mucho las cantidades, pero he observado una cosa, le gente, mis conocidos, cuando me ven comer como una mula, me ven feliz y ellos son felices viéndome feliz, así que es una pescadilla que se muerde la cola.
Sin embargo, ellos no comparten todos y cada uno de los momentos en los que estoy feliz, por no haber comido y por tanto, verme más delgado.
Y sí, es curioso, me he fijado y me ocurre en muchas ocasiones y de manera muy dispar, por ejemplo:
- Mis padres saben que trago como una mala bestia, pero sin embargo, de vez en cuando, hay alguna sorpresa visible a mis ojos por algún lugar de la casa, por ejemplo, lomo de caña ibérico, que no es del todo malo, pero me lleva a hartarme de pan... con lomo, menos mal que no le echo aceite de oliva.
- Cuando salgo por ahí con mis amigos, voy concienciado en no comer muchos, no comer algo graso o con exceso de hidratos, pero es ponernos a pedir y pierdo el control, a lo que ellos piden, yo añado algún capricho, que estropea mi sabia elección, o como en exceso lo que a ellos les sobra, pero me ven contento.
- O esos casos en los que vas a casa de alguien con el que has quedado para luego, y les dices que no, que no quieres nada, que acabas de merendar, y aún así te ponen una bandeja de algo por delante justo una hora antes de salir a cenar.
Son situaciones en las que me encuentro un poco incomodo, porque me harto de decir no, no, no, no y no, pero al final acaba ocurriendo que como un poco más de la cuenta.
En fin, amigos, que seguimos en este largo y duro proceso de perder peso, con todos los obstáculos del camino, como en el Mario Bros ;-)
Energíaaaaa
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